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13 de septiembre de 2006
MUNDARAÍN: “EL ESTADO DEBE FINANCIAR A LAS ORGANIZACIONES POLÍTICAS PARA PROMOVER LA DEMOCRACIA”
* Esta propuesta la hizo el Defensor del Pueblo en el marco del “I Encuentro Interinstitucional sobre el Financiamiento de las Organizaciones con Fines Políticos y las Campañas Electorales”, organizado por el CNE

El Defensor del Pueblo, Germán Mundaraín, cree que es necesario que se revise el mandato constitucional que elimina el financiamiento a las organizaciones con fines políticos y se mostró de acuerdo con la apertura del debate para regular esa actividad y fortalecer el sistema democrático.

 

El representante del Poder Moral dijo, durante su participación en el “I Encuentro Interinstitucional sobre el Financiamiento de las Organizaciones con Fines Políticos y las Campañas Electorales” organizado por el CNE, que  “es importante que el Estado facilite a los partidos y a las demás organizaciones con fines políticos, mecanismos de sustentación”, y consideró que en la posible reforma de la Constitución, planteada para el próximo año, debe abrirse un debate sobre el tema.

 

A su juicio, “lo lógico es examinar mecanismos mediante los cuales el Estado contribuya a una actividad pública para promover la participación y fortalecer el sistema democrático”, y aunque consideró que el Estado debe financiar a los partidos, “no debe hacerlo en los términos anteriores, sino mediante una regulación sobre el uso y destino de los recursos suministrados”.

 

Explicó que “los partidos son expresiones políticas de participación, de la pluralidad democrática que existe en el país y por eso creo que el Estado debe buscar mecanismos, sin tener que cargar con el sustento del partido, para contribuir a que los partidos se puedan expresar en los procesos de elecciones”.

 

El Defensor propuso que el Estado les facilite el acceso a los medios de comunicación social y liberarlos de gastos mediante mecanismos de exoneraciones fiscales, de acuerdo al caudal electoral. De igual forma se mostró de acuerdo con la creación de un sistema mixto donde las organizaciones con fines políticos puedan obtener aporte de sus adeptos, del sector privado y del Estado

 

Mundaraín  expresó que a la institución que representa le preocupa el tema, “porque el aspecto económico signa la importancia de las instituciones y porque el Poder Moral tiene un representante ante el CNE, que es el rector Germán Yépez”.

 

Durante su exposición el Defensor hizo un breve compendio histórico sobre las campañas electorales en Venezuela y las formas como se realizaba el financiamiento de las organizaciones políticas que aspiraban tener el control del poder en el país a partir de 1947, tras la elección de Rómulo Gallegos a la Presidencia de la República y su salida del poder,  hasta la actualidad.

 

Para evitar que las organizaciones con fines políticos sean financiadas por capitales de las potencias internacionales, Mundaraín planteó controlar el origen y el destino de los fondos.  “Sobre todo que se controlen, no tan sólo a los que se llaman actores políticos, sino también a aquellos actores políticos que actúan en forma enmascarada, como por ejemplo a las organizaciones no gubernamentales”.

 

Otros ponentes

En el segundo día del Encuentro Interinstitucional, participó como representante de la  Fiscalía General de la República, Keimer Ávila, quien se refirió a las bases jurídicas y constitucionales que sustentaban el financiamiento de las organizaciones políticas y las campañas electorales, a la reforma constitucional y los actuales mecanismos legales que prohíben esa actividad por parte del Estado, así como el conjunto de leyes  y normativas que penalizan la violación en esa materia.

 

Entretanto el representante de la Superintendencia de Bancos (Sudeban), Pavel García, habló sobre los mecanismos existentes para apoyar al CNE en las investigaciones sobre los fondos de las campañas electorales.

 

Destacó la importancia de que se investigue el destino de los gastos de cada organización, para identificar sus orígenes, porque eso contribuye con la creación de una cultura de rendición de cuentas y de transparencia. Añadió que es señal de alerta cuando las organizaciones políticas se niegan a entregarle información al CNE sobre sus ingresos.